14 septiembre, 2016

Madame Antoine


¿De qué trata?: Go Hye Rim es una adivina dueña del café "Madame Antoine", al cual nombró así ya que dice poder hablar con la difunta reina de Francia del mismo nombre, quien le cuenta la fortuna de las personas. Aunque, en realidad ella sólo es capaz de ver a través de las historias de la gente debido a su inteligencia y agudo sentido.
Choi Soo Hyun es un famoso psicoterapeuta que no cree en el amor, por lo que se encuentra realizando un proyecto de pruebas psicológicas en mujeres para demostrar que el verdadero amor no existe. Él decide utilizar a Hye Rim como sujeto de su próximo proyecto, sin embargo, se verá en problemas cuando sea él quién termine siendo víctima de su propio experimento enamorándose de Hye Rim.

Opinión: después de un dorama como el pasado que vi, High Society, quería un dorama más ameno y la verdad es que Madame Antoine ha cumplido con creces. Partiendo de que es un drama donde la base es el mundo de la psicología ya tenía algo por lo que destacarse entre los otros que tengo para ver, y creo que ha sido un gran acierto el mezclar tanto el trabajo de los psicólogos, el romance y los casos donde es necesario acudir a uno.

Como buena protagonista de ya unos pocos doramas de las hermanas Hong, Han Ye Seul ha sido un gran acierto para el papel de Go Hye Rim, en este caso vemos un papel más maduro y un poco más tocado que en los anteriores en los que he podido ver a esta gran actriz. Go Hye Rim es una mujer en sus treinta que tras un matrimonio fracasado se ve no merecedora de un nuevo romance, a su vez, al querer darle la mejor la mejor educación a su hija se ve obligada a trabajar como adivina sacando a la luz sus habilidades de actuación.

En este panorama se encuentra nuestra protagonista cuando llega el famoso psiquiatra Choi Soo Hyun. El primer encuentro es terrible, para las dos partes, el odio surge nada más saben quién es el otro y Soo Hyun es entonces cuando decide utilizar a Hye Rim como el nuevo sujeto de su experimento, todo gracias a la recomendación de su ayudante Jin Ho.

Choi Soo Hyun ha sido un gran personaje, me ha encantado en cada minuto del dorama a pesar de que su objetivo y ese experimento era lo más terrible del mundo. Sung Joon lo ha clavado e incluso me ha gustado más aquí que en High Society, las apariciones de Soo Hyun tenían un algo que te llevaban a adorarle, a pesar de que hiciera algo mal, tenía un algo que te capturaba. Lo mejor sin duda fue cuando empieza a profundizar en sus sentimientos, ahí es cuando se ve el dilema en el que está y es cuando da los momentos más graciosos, tristes y molestos.

Este famoso experimento tiene varias fases y consta de cuatro sujetos. En primer lugar, tenemos a la mujer, en este caso en sus treinta años, a la que “casualmente” se le irán acercando tres tipos de hombres; uno adinerado con una personalidad menos atractiva, el joven atleta simpático y a mediados de sus veinte y, finalmente, el joven con apenas veinte años inocente. La mujer después de varios encuentros con estos tres hombres deberá elegir a uno y entonces se pasará a la segunda etapa del experimento, una más irritable para el espectador.
La mujer como ya se ha comentado es Go Hye Rim y el adinerado hombre es Soo Hyun, para los dos otros tipos de hombres introducirá en el experimento a su hermano mejor Seung Chan, el joven atleta, y a su joven e inocente ayudante Jin Ho. Así se formará por completo la trama amorosa.

Los personajes secundarios tienen su relevancia e incluso sus diferentes momentos a lo largo de los dieciséis capítulos. Sí es cierto que la aparición y después estancia de la doctora Mi Ran en el drama me dejó un poco extrañada, pero después sí tiene una utilidad y llegas a sentir mucha simpatía por ella.

Madame Antoine ha sido un dorama que ha sabido dosificar muy bien los momentos románticos, los dramáticos y los sucesos donde Soo Hyun y Hye Rim trabajaban juntos ayudando a diferentes personas con sus traumas o problemas. Esos momentos donde tenían que trabajar como psiquiatras me gustaron muchísimo, eran muy interesantes y quizá llegabas a interesarte un poco más por el cao que por el debate romántico de los protagonistas.

Pero eso sí, cuando lo terminas te deja muy buena sensación porque no se deja nada en el tintero, todo tiene su explicación y su momento, no hay nada que al final te deje como que se han olvidado de algo; por lo que, aunque no vaya a ser el doramazo del año en mayúsculas, ha sido un gran dorama bien hecho. Muy recomendable.

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