Suijin no hanayome

Sin saber nada de este manga me precipité a leer los capítulos que estaban disponibles solo por la portada de curiosa que aparecía junto a su nombre. Nada más ver el dibujo en blanco y negro del primer capítulo supe que era de la mangaka de Reimei no Arcana, así que ya iba con la premisa de que la historia tenía que estar interesante.

Me cautivó la historia desde el primer capítulo, es una mezcla entre la típica leyenda de la novia del Dios del agua junto con un cuento infantil, me gustó mucho y más que el inicio fuera con una niña y no directamente con una adolescente. 

Dicho esto, la historia se centra en cómo la pequeña Asashi es transportada a otra época después de caer a un pequeño estanque y es ofrecida como novia al Dios del agua por tener un color de pelo y ojos diferentes. Dicho dios encuentra en ella algo, no sé si juguete o experimento, que hace querer observarla y ver cómo reacciona.

Nada más llegar a esa época la pequeña se encuentra perdida y es un pequeño niño, Subaru, quien la ayuda; por lo que con él ya hemos conocido a uno de los chicos principales de la historia y que, como me pasó con Loki en Reimei no Arcana, no sé muy bien si va a ser un personaje bueno o malo. 

También tenemos al famoso e insensible Dios del agua que completa el triángulo amoroso, este se presenta como alguien que no nota los sentimientos humanos y ve un entretenimiento el que estos sufran, pero poco a poco nota cierto cambio en su comportamiento hacia su joven prometida.

Leídos los primeros diez capítulos aún no tengo claro hacia qué lados tirarán los personajes masculinos; Subaru tiene pequeños detalles que no me parecen de fiar aunque estén referidos a su familia y el Dios del agua parece que va tomando cariño a Asashi o al menos a no verla como un juguete, así que me tiene intrigada por cómo van a ir las cosas con estos personajes y la historia que hay detrás de este triángulo amoroso. ¿La seguiré? Por supuesto, más enganchada no me puede tener.