24 febrero, 2020

Sodatechi Maou!


¿De qué trata?: El Infierno está bajo la supervisión de los tres Reyes Demonios controladores y crueles, hasta el día en que aparece un humano de 3 años llamado Maris. ¿Deberían ejecutarlo? ¿Hacerlo esclavo? O ... ¿criarlo? Con todo el infierno involucrado, la impensable crianza de los hijos comienza.

Opinión: para el día de hoy vengo con la reseña de Sodatechi Maou!, lo empecé a leer hace unos años pero decidí aparcarlo por la tardanza en la traducción de él, pero hace poco me enteré de su finalización y vino el momento de retomarlo.

La trama de Sodatechi Maou! es muy sencilla, los actuales regentes del Infierno de repente se topan con que ha aparecido un infante humano en sus dominios y tras ver la inocencia de la criatura no son capaces de hacer las maldades que suelen hacer a los invasores o desobedientes, por lo que desde ese momento Death Mask (uno de los tres reyes) principalmente se hará cargo del niño junto con la colaboración de los otros dos regentes. 

La aparición y cuidado de Maris cambia por completo a los reyes, Death Mask quien era el más malvado de todos comienza a preocuparse por Maris, sus reacciones, su comportamiento y la forma en que debe vivir Maris se convierten en su principal tema; a Dark Night, el más mujeriego, parece que no le llega a preocupar del todo la aparición de Maris, pero es gracias a él con que comienza a centrarse más en la vida y, por último, Giant Lock por fin tiene a alguien que le comprenda más.

Durante los ocho tomos que tiene la serie veremos la vida de estos tres reyes con el niño, por lo que los capítulos serán en general con un tono bastante amistoso, algo entrañable y con humor. No todo es tan maravilloso, la verdad es que cuando lo retomé lo hice con ganas pero al llegar al último capítulo se me quedó una sensación algo fría, creo que podría haber dejado un mejor sabor de boca si hubieran cambiado las últimas tres páginas, y lo digo de verdad, con solo cambiar las tres últimas páginas estaríamos hablando de otra sensación.

Pero bueno, en general y a pesar de eso está bien el manga, no puedo decir que sea de esos mangas que te absorben y tienen un trasfondo que te llega al corazón, pero es muy entretenido y el dibujo, aun no siendo bonito, está muy bien, le pega al tono general del manga.

Lo bueno que tiene: entretenido y en ocasiones entrañable.
Lo malo que tiene: un final abierto y destemplado.

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